¿Qué nos pasa juntos?
«Para la mayoría de la gente, el problema del amor consiste fundamentalmente en ser amado, y no en amar, no en la propia capacidad de amar» E. Fromm
Puede parecer un poco raro pero cuando hablamos de la pareja no nos referimos a la suma de dos personas. En este caso 1+1 no son 2. Cuando hablamos de la pareja decimos que 1+1 son 3. Sorprendente pero cierto. Es un ejemplo muy gráfico para explicar que la pareja es el nuevo vínculo que dos personas crean juntas. Decirlo es fácil pero muchas personas encuentran dificultades y complicaciones en la creación de ese vínculo.
La pareja se crea y tiene vida
Vínculo proviene del latín y significa unión, atadura de una persona o una cosa con otra. Por eso se suele tener la fantasía de que es estable, fijo, «para toda la vida». La realidad es que un vínculo es dinámico y está expuesto a numerosos factores externo e internos (de cada uno de sus miembros) que pueden hacer que se resienta y debilite.
La idea de que la pareja es dinámica va unida a que tiene su propia historia y pasa por diversas etapas en su desarrollo (desde que la pareja se conoce y empieza la convivencia hasta la transición de la vejez, pasando por la crianza de los hijos, si es que se tienen). También pueden darse cambios inesperados o bruscos como una enfermedad, el fallecimiento del algún familiar, desempleo de alguno de los miembros de la pareja… En cada uno de estos momentos de la historia de la pareja pueden surgir dificultades. Cada crisis por la que se pasa, además del dolor y sufrimiento que producen, es una oportunidad de cambio y la pareja puede salir fortalecida.
Por lo general, la pareja consulta cuando están pasando una de esas crisis, sienten que no tiene solución. Seguramente han intentado cambiar pero parece que todo sigue igual y estar juntos se hace complicado. Cuando llegan no vienen solos, el sufrimiento les acompaña. Quizás ese sufrimiento es reciente, quizás es antiguo, quizás de uno de los dos, de ambos o de la relación, pero hay sufrimiento.
¿En qué les puede ayudar la terapia de pareja? El espacio terapéutico será el ámbito en el que abordar ese sufrimiento para aliviarlo. Veamos, ¿cómo se hace?, ¿qué se hace en una terapia de pareja?
La relación que mantienen entre ellos y con la terapeuta durante la sesión permite conocer de manera directa cómo es ese vínculo y buscar su sentido. En el aquí y ahora de la sesión se trabaja sobre ese vínculo. La terapeuta acompaña a la pareja en los momentos dolorosos y de incertidumbre. Les acompaña en ese camino de comprensión y aprendizaje. También les ayuda a poner palabras a las características de ese vínculo. Esas características suelen ser elementos desconocidos y no pensados que están jugando un papel fundamental.
En cada sesión se piensa sobre lo que se habla, se escucha lo que se dice y se busca el sentido que todo eso tiene para la pareja y para cada miembro. Ese conocimiento les ayudará a aliviar su dolor, romper las pautas de relación dañinas y les dará la libertad de poder crear juntos un vínculo nuevo y creativo.
Cada pareja tiene su modo de funcionamiento. Cada pareja es única y por lo tanto, diferente a las demás. Por eso, uno de los objetivos de la terapia es que los miembros de la pareja entiendan y reconozcan de qué manera se están vinculando. Por lo general, se suele repetir una misma pauta de interacción aunque sea dolorosa o lleve a desencuentros. Entonces, ¿por qué se repite? A lo largo de la terapia se irá comprendiendo por qué se relacionan así, para qué lo hacen, qué les une, qué anhelan relacionándose así, qué le están pidiendo al otro, qué dicen realmente cuando discuten o pelean, qué pasa cuando están juntos.
La forma de relacionarnos afortunadamente es fácil de observar y es lo que nos permite ir sacando a la luz otros aspectos que estaban menos claros y se relacionan con las historias personales de cada persona que forma la pareja. Pararse a pensar y preguntarse por el vínculo de cada pareja permite ir de lo superficial a la profundo , de lo observable a lo escondido. Este trabajo ayuda a ir entendiendo lo que cada uno de los miembros pone en esa relación, a explicar por qué se relaciona de esa manera y a entender las dificultades que tienen para construir un vínculo juntos.
La terapia de pareja se centra en el análisis del vínculo que une a las dos personas. Cada persona que forma una pareja, a su vez tiene una historia de relaciones (con sus padres, hermanos, amigos, pareja anteriores…) que de alguna manera influyen en la creación del nuevo vínculo y permiten entender el sentido de las dificultades con las que se están encontrando.