A través de las nuevas tecnologías se expresa de forma diferente algo que es antiguo, la fuerza de la sexualidad en la adolescencia.
Hoy en día vemos como los jóvenes exhiben su sexualidad a través de las redes sociales. Esto no es negativo en sí mismo. Es normal que los jóvenes se expresen de una manera diferente respecto a los adultos. Necesitan diferenciarse para crecer. En este sentido, lo que parece nuevo, no lo es.
Detenernos para pensar sobre estas nuevas formas de expresar, de vivir la sexualidad adolescente puede ayudarnos a entenderlas y aliviar la angustia de muchos padres y madres ante las conductas de sus hijos e hijas. También puede ayudar a los chicos y chicas jóvenes a reflexionar sobre su sexualidad.
La sexualidad juvenil hoy en día
Hoy en día hay jóvenes que gravan vídeos cuando están besándose, tocándose, teniendo relaciones sexuales o juegos sexuales con compañeros. Saltan a los medios de comunicación noticias relacionadas con la difusión de este tipo de vídeos sin el consentimiento de alguna de las partes.También nos podemos encontrar con jóvenes para quienes lo importante es el número de chicas o chicos con los que se han besado o estado una tarde o una noche. En esos casos lo importante para ellos es acumular encuentros, besos, chicos o chicas, y las fotos de esos encuentros. Da un poco igual quién ese “alguien” con quien se encontraron rápidamente.
Algo parecido sucede cuando lo relevante es el número de personas que han visto sus fotos sensuales en alguna red social. No importa quienes lo vieron, qué ojos lo miraron. No se piensa en el riesgo que puede haber detrás de la pantalla. Si algo tienen los adolescentes es que creen no hay riesgos, niegan que los hayan, no ven los riesgos allí donde un adulto los tiene claros.
A través de las redes sociales sus relaciones pasan a ser públicas, y poco a poco se borra la diferencia entre lo privado y lo público. Parece que todo es público, todo puede ser público, publicado. Tanto para los adolescentes como para muchos adultos. Nos encontramos ante un aumento del exhibicionismo.
En este tipo de situaciones, por lo general, suele haber dificultades para ver a la otra persona con sus propios deseos. También para reconocer el propio. Se tienen esas conductas sin llegar a disfrutarlas, sin disfrutar de ese beso o de ese encuentro. Lo placentero está en que lo vean los demás. Lo importante es la mirada, las miradas que vienen luego.
¿Por qué son tan importantes estas miradas?
Para ellos son espejos en los que se reflejan, en los que se miran. Necesitan esos reflejos por muy variados motivos, cada uno los necesita por algo y tendrán un sentido según su historia. Quizás su importancia o su valor está en juego, quizás busca la aprobación de sus iguales, o quiere reflejar una imagen parecida a alguien, alguien a quien quiere parecerse… será importante trabajar con ese joven o esa joven para qué lo hace, qué busca en esas miradas.
Si crees que tu hijo o hija adolescente necesita ayuda o quieres que te ayude a manejar el crecimiento de tu hijo consulta conmigo.